La propia naturaleza de la lógica limitada desde el << oportunismo >> económico puede hacer pensar que es rentable para uno, realizar esa transacción. El siguiente , ante similar cuestión, por simple secuenciación axiomática, volverá a efecturar tal transacción. Y así. Sucesivamente. Ninguno de todos los compradores se planteará comer una sóla de ellas. Las manzanas. Simplemente se irán pasando la cesta de manzanas de comprador en comprador hasta un punto, en que se termien pudriendo, sin haber cumplido sus función: alimentar. Simplemente se : especuló con ellas.
La realidad de la crisis actual atraviesa- a mi juicio- un paralelismo claro de individualismo del propio ser humano como parte de una sociedad indiferente; y una ausencia de regulación de las instituciones públicas.
La especulación inmobiliaria consiste en detectar un periodo inflacionista, probablemente autoprovocado por quienes poseen el capital para ello ocasionado por la recompra de inmuebles rústicos o céntricos, para que estos vayan revalorizándose en el tiempo. Una vez llegado al límite inflacionista, el especulador se encargará de vender dicho inmueble a un precio considerablemente mayor al de su precio inicial, y obtener por ello un beneficio a partir de un bien no productivo, cuyo precio es ajeno al ritmo económico, y no perecedero en el tiempo.
Llegados a este punto, el especulador debe ser cauteloso. Ha de saber que habrá un momento de ruptura. Los agentes económicos e institucionales, que están maniatados a este tipo de estrategias, simplemente son victimas y precio-aceptantes de lo que ha provocado una subida de precios que al oír un cráck, se da paso a una etapa deflacionista que se traduce en una miseria social en todos los niveles. Y es ahí donde empieza el show. Se recurrirá a la demanda de responsabilidades de cada uno de los eslabones implicados en dicha secuencia. Empezaremos por no poder ser capaces de remunerar la mano de obra poco cualificada. No seremos capaces de cumplir con los proveedores de servicios vinculados a la construcción-transporte, materiales, agentes inmobiliarios, entidades financieras, economías domesticas y PYMES-.
En tales circunstancias, en donde la desaceleración es un modo político para hablar de la estupidez por parte de cada uno, el especulador deberá cersiorarse que aquel inmueble que hasta hace un tiempo tenía un precio excesivamente alto, ocasionado intecionalmente para un beneficio particular, ahora está por los suelos. Y ser verá tentado a volver a iniciar - en medio plazo- nuevamente el proceso. ¿ Por que? Por que él sabe que se trata de bienes que no ofrecen ningún tipo de productividad y simplemente su " valor" varía en función de la etapa en la que se encuentre tal economía.
El especulador no deberá actuar de manera aislada. Sabe que las entidades financieras funcionan como lubricantes para agilizar el proceso especulativo de bienes inmuebles. Será una entidad especialmente favorable y propensa a dar todas las facilidades a quienes deseen adquirir dichas edificaciones, al margen de su condición o su capacidad de afrontar tal endeudamiento. Por la existencia de un valor ex post de mencionada deuda ; materializado en un cumplimiento porcentual llamado " interés variable ". De este modo, quien adquiera un inmueble y piense que en un año debe hacer frente a una hipoteca o préstamo del 3% , no sabe que si dicho interés varía en el siguiente periodo al 5% , este no solo repercutirá en la obligación pactada, sino que estará concidionado a una variabilidad macroeconómica que no depende ni de él ni del banco, además de la inflación y el propio precio del dinero.
La realidad. Un aumento considerable de la morosidad y los impagos. La caída masiva de la demanda de viviendas. El traslado de capitales a nuevos escenarios - nuevas etapas donde el especulador puede empezar su proceso de recompra-. Desahucios, caídas en bolsa, desconfianza de inversores y una economía rota que incide sobre los más débiles y se configura para volver- en un periodo- a crear un escenario propenso a los requerimientos de comodidad del especulador.
Si desea usted ser un especulador, recuerde que :
Debe poseer suficiente capital para realizar inversiones que supongan beneficios que superen al coste de la transacción en el tiempo de espera
Debe buscar una sociedad cortoplazista. Consumista.Idiota. Que viva el presente y se encuentre en un apogeo económico que pueda cegarla de las repercusiones de un endeudamiento basura a medio y largo plazo.
Debe ser cauteloso.
Debe saber identificar el precio máximo antes de vender, olvidarse e irse.
No debe de tener agallas. Ni miramientos. Debe únicamente motivarse por el beneficio acerca de la especulación.No debe importarle las repercusiones sobre la economía. Es usted quien la gestiona.
Debe actuar con libertad. Sepa usted que no hay organismos suficientemente desarrollados para hacerle frente. No se preocupe. Aunque provoque un largo periodo de desestructuración social usted no es un delincuente. Es una persona, lista.
Recuerde. Puede hacerse rico. ¿ Acosta de la ignorancia y la confianza esporádica de las personas, en un mundo donde no tener en cuenta el futuro, se paga muy caro? ¿ A raíz de que hay quienes creen que endeudarse es un juego o una oportunidad? ¿ Del malestar de todos aquellos que no ven el peligro que guarda un préstamo? Si. Usted puede ser un buen especulador.
¡ Por que la vida son dos días. Uno para comprar, y otro para venderlo a un mejor precio !
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